¡A prueba! KTM Kapoho Prestige (¡con vídeo!)

La verdad es que, tras unos cuantos kilómetros recorridos con la KTM Kapoho Prestige, nos quedan dudas, como comentamos en nuestro aperitivo ‘4 cosas que nos encantan de…’, de si las nuevas eBike light son tan necesarias… porque si quieres pegarte una paliza con duras sesiones de pedaleo, con la KTM podrás hacerlo sin problema. Y si necesitas una ayudita cuando las fuerzas flaqueen, pues también la tendrás

La KTM Kapoho Prestige responde al estándar de las ‘rudas’ bicicletas eléctricas: es majestuosa, de grandes dimensiones (y peso), con largos recorridos de suspensión y un potente motor de batería interminable… A pesar de sus apariencias, la Kapoho está encuadrada en la categoría de Allmountain, quedando la KTM Prowler para el Enduro más radical.

Así que, a pesar de todo, ¡hay un modelo en la firma austríaca aún más grande!… Nuestra protagonista posee recorridos de suspensión de 160 mm en ambos ejes y unas cotas del cuadro que contradicen lo que ven nuestros ojos: la Kapoho es más pequeña de lo que parece… La Kapoho talla M que dispusimos poseía una distancia entre ejes de 1.214 mm, al nivel de ‘pulmonares’ de Allmountain o Enduro… Las vainas, por ejemplo, gracias a su condición de Mullet, se quedaban en 442 mm. Pero vamos a profundizar un poco más que seguro que es lo que estás deseando…

Una geometría que enamora…

Del tema del motor, eje central de una eBike, hablaremos más tarde. Queremos centrarnos un poco en lo que nos aporta la combinación Mullet de ruedas: ya comentamos en nuestra ‘avanzadilla’ que, en bicicletas largas y pesadas como son las ebikes, tener una rueda de 27,5” en la trasera lo vemos muy positivo…

Como hemos comentado, esa rueda permite disponer de una comedida distancia entre ejes, lo que permitía a la Kapoho comportarse de una forma impecable cuando el sendero se retorcía. Y es que esas inercias que suelen generar las grandes eBikes con ruedas de 29” no existían (al menos no tan acusadas) en nuestra Kapoho. Era relativamente fácil girar con ella y salir catapultado hacia la siguiente curva gracias al poder de tracción de su motor y del poderoso neumático trasero (2,80” de anchura).

Este gran neumático ofrecía también un alto poder de filtración, lo que mejoraba este apartado…porque el sistema de suspensión trasero de la Kapoho tenía un comportamiento bastante bueno, aunque algo por debajo de los mejores sistemas del mercado: la rueda tendía a rebotar y a perder contacto con el suelo más de la cuenta. Regulamos el rebote bastante rápido para que no se le acumulara el trabajo al amortiguador, pero creemos que el tema era más del propio esquema de suspensión.

Ojo, no estamos en absoluto criticando el sistema, ya que filtra muy bien e imprime seguridad bajando, pero, creemos que es mejorable… También es cierto que esta KTM, por su peso (e inercias que se generan bajando) es capaz de rodar muy, muy rápido, lo que no ayudaba al trabajo de la suspensión.

…y un conjunto motor-batería que es el alma de la Kapoho

Vamos a empezar por lo más fácil: la batería, con 750 Wh de capacidad, es infinita. En ocasiones hemos hablado de las capacidades tan altas que se están ofertando en la actualidad y que, en un uso de la bicicleta muy radical puede dar lugar a dos situaciones: una de ellas, que tires de los modos menos ‘gastones’ y que tu cuerpo no aguante el fuerte ritmo (y la exigencia física) de una bicicleta de estas características durante tantísimos kilómetros…

Un tipo de ruta que hicimos contenía fuertes desniveles y mucha ‘trialera’ (de bajada y de subida), en el que rodamos SIEMPRE en modo Eco: tras regresar a casa ‘machacados’ con cifras en nuestro ciclocomputador del orden de 60 km, la autonomía restante (indicada en el display Kiox que incorpora) era del…¡60%!

Y, la segunda situación, era echar mano de modos de más potencia y que la autonomía se resintiera pero, ¿cuánto?. Hicimos varias escapadas con un enfoque también ‘cañero’ en el modo eMtb que es una especie de modo ‘automático’ que va proporcionando la potencia justa en cada momento (es una combinación de todos los modos, llegando al máximo de aporte que es del 340%), ayudado además por el Extended Boost que incorpora la nueva versión Smart System de este motor: una pequeña ‘ayudita’ extra al alargar la entrega de potencia (no se corta tan rápido), algo ideal para escalar sobre piedras y/o raíces….

Pues en ese modo, y realizando la mismas rutas que las que anteriormente comentábamos (del orden de 60 km), la autonomía restante que nos indicaba el display era del 20%… como verás, ‘autonomía para rato’.

Centrándonos en el comportamiento del motor, su aporte de potencia era descomunal: ‘trialear’ con esta bicicleta era un placer, por la tracción de su neumático y la constante entrega de potencia. Eso sí, siempre en modos que aportaran poco empuje, porque si no, acababas saliéndote del sendero… Porque, sin ser un motor de entrega brusca, intentar ‘ratonear’ con el modo Turbo, era prácticamente imposible…

Horquilla Fox 36 Factory e-Bike FIT4

La verdad es que, en una bicicleta de estas características, que te permite ir extremadamente rápido, tanto subiendo como bajando, y que posee un peso alto, ya que hemos comprobado 25,7 kg con pedales (corroborando los 25,4 kg que declara KTM), una buena horquilla se nos antoja fundamental. Nos atreveríamos a decir que la Fox 36 Factory que instalaba era la mitad del buen hacer del comportamiento de esta KTM.

Ofrecía 160 mm de recorrido, suficientes para el enfoque de la Kapoho pero, lo que más destacaba era su fino comportamiento. La sensibilidad era ‘brutal’ absorbiendo cualquier irregularidad, permitiendo una conducción fluida en todo momento. A la hora de bajar secciones muy complejas, la 36 Factory te permitía un guiado de la dirección perfecto, sin movimientos bruscos y pudiendo llevar la Kapoho exactamente por donde queríamos, lo que ahondaba en una sensación de seguridad enorme.

Pero es que subiendo trialeras, aunque se aligerara al cargar el peso sobre la rueda trasera, la Fox 36 seguía ofreciendo la misma perfección a la hora de filtrar, pudiendo esquivar obstáculos con suma facilidad. Las posibilidades de ajuste son suficientes: es cierto que no dispone de las regulaciones a alta y baja velocidad de la Grip2, pero para esta bicicleta, que no está ideada (en principio) para competir, los tres modos que ofrecía (Open, Medium y Firm) eran adecuados: el modo Medium, con el peso de la Kapoho, se nos mostró idóneo para casi todas las situaciones (endurecía un poco la compresión).

Transmisión y frenos Shimano XTR

Otro de los activos de esta KTM es el conjunto de transmisión y frenos firmado por Shimano. El conjunto cambio+pulsador XTR (las bielas son firmadas por la propia KTM y el cassette es un XT), además de poseer unos acabados exquisitos, ofrecía un comportamiento intachable. Ya lo comentamos en nuestro avance: no echamos en falta el accionamiento electrónico de otros modelos de otras marcas. El manejo de esta es perfecto, no falló en ningún momento y su suavidad y facilidad en su accionamiento nos ayudó cuando las cosas se ponían ‘feas’.

Los frenos XTR, por su parte, no nos dieron el más mínimo problema. Las prestaciones de las grandes pastillas que son actuadas por los cuatro pistones de sus pinzas (es el acabado M9120) no decayeron, por mucho que abusáramos de la frenada, manteniendo su buen hacer tras largas bajadas… la potencia era suficiente (no descomunal), sobre todo teniendo en cuenta que el peso bicicleta+piloto era alto…

Veredicto GoRide…

La KTM Kapoho Prestige nos ha parecido una eBike muy equilibrada: aunque su aspecto sea radical, su comportamiento permite destacar en múltiples ámbitos.

Bajando es excepcional, con una postura cómoda, un gran manejo gracias a su manillar de carbono KTM Prime Trail y 800 mm de anchura y la buena labor de la preciosa tija Fox Transfer Factory de rápido manejo gracias al pulsador Shimano instalado. Las suspensiones trabajan bien, aunque hay un pequeño desequilibrio: la delantera es perfecta, la trasera no…

A la hora de serpentear por singletracks, la Kapoho es más ágil de lo que imaginas, ya que la bicicleta es corta y la dirección es rápida (a pesar del enorme neumático de 2,60”). A la hora de rodar por pistas, no representa ningún problema aunque el lastre es alto (tanto por la anchura de ambos neumáticos como por el peso total) lo que hará que te tengas que emplear a fondo si quieres rodar por encima de los 25 km/h que es cuando se corta la asistencia.

Subiendo, en especial por senderos técnicos, nos ha encantado el poder de tracción que posee y el perfecto guiado de la dirección: con un poco de destreza, subes por donde te lo propongas…

La autonomía es más que suficiente, el motor trabaja a la perfección, las posibilidades de personalización del mismo son altas, el equipamiento es de calidad…

¿Defectos? Además del mencionado trabajo de la suspensión trasera, el peso se nos antoja, para la calidad de los componentes que instala y el triángulo delantero en carbono, algo elevado…

Y ese precio que, sin ser de los más altos del sector (desgraciadamente las hay MUCHO más caras) tampoco es un ‘regalo’: 8.299 €….

A destacar…

El trabajo en cualquier circunstancia de la horquilla Fox 36 Factory Fit4
Tracción descomunal tanto por la entrega de potencia del Bosch como por su ancho neumático trasero de 2,80”…
Acabados y equipamiento de mucha calidad

A mejorar…

Sensibilidad del sistema de suspensión trasero.
Peso algo elevado

Ficha técnica KTM Kapoho Prestige

Cuadro: Fibra de carbono Performance – triángulo trasero en aluminio // Motor: Bosch Performance Line CX Smart System // Batería: Bosch PowerTube 750 Wh // Transmisión: Shimano XTR 12s // Frenos: Shimano XTR M9120 (discos 203/180 mm) // Ruedas: Mavic E-Deemax (D) 29”x 30 mm (T) 27,5” x 35 mm // Neumáticos: (D) Schwalbe Eddy Current Front Evo SuperTrail TLE 2,60″ x 29″ (T) Schwalbe Eddy Current Rear Evo SuperGravity TLE 2,80″ x 27,5″ // Manillar: KTM Prime TRail Carbon 800 mm // Tija: Fox Transfer Factory 125 mm // Sillín: Selle San Marco GND // Peso: 25,7 kg (con pedales verificado por GoRide) // Precio: 8.299 €