Hoy Sonny Colbrelli hubiera tenido hoy que defender la edición 2021 del Infierno del Norte… el italiano, que venció la Paris-Roubaix ‘postpandemia’, se pronunció sobre su futuro, que reconoce aún incierto tras la cardiopatía que padeció poco después de finalizar la primera etapa de la Volta a Catalunya.

El corredor del Bahrain Victorious tiene implantado un desfibrilador subcutáneo, prefiriendo reservarse a hacer proyecciones sobre las posibilidades de volver al ciclismo de alta competición. “Llegará un momento en el que haremos todas las valoraciones, luego decidiremos”, confía Colbrelli, que hoy domingo debería haber defendido su triunfo del año pasado en la París-Roubaix.

“Todavía no me siento como un ex corredor. En primer lugar, me considero afortunado, muy afortunado. Al principio, estaba furioso con el mundo, pensé, ‘¿por qué yo?’. Ahora estoy bien y disfrutando cada momento”, dijo el italiano de 31 años.

El campeón de Europa de 2021 ya no podrá competir en territorio italiano por llevar un desfibrilador. Según la ley italiana vigente desde 2017, un atleta ya no puede practicar deportes de alto rendimiento en el territorio con el implante de un dispositivo para prevenir incidentes cardíacos. Sonny Colbrelli se encuentra en la misma situación que el futbolista Christian Eriksen, quien sufrió un paro cardíaco durante la Eurocopa 2020 el pasado mes de junio.

Queda por ver si la Union Cycliste Internationale (UCI) podría autorizar al corredor del Bahrein Victorious a reanudar la competición fuera del territorio italiano con un desfibrilador interno.

Fotos: Luc Claessen/Getty Images // París-Roubaix

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