La 2ª etapa de la París-Niza fue poco más que un largo bostezo. Los únicos animadores esperados no aparecieron -la fuga de un grupo de respetables ‘rodillos’ y el viento cruzado- en las carreteras de la Carrera del Sol, y se vivió una carrera sumamente monótona, en la que no pasó nada, salvo el inevitable sprint masivo para decidir el ganador del día.

Y este fue… holandés. Pero no necesariamente quién más esperaba, como Olav Kooij (Visma Lease a Bike), ganador de la primera etapa, o incluso Fabio Jakobsen (dsm-firmenich PostNL) o Dylan Groenewegen (Jayco AlUla). Esta vez, Arvid de Kleijn, un velocista Tudor, surgió del gran grupo.

Pero no fue exactamente una sorpresa. Kleijn ya había sido tercero el domingo en Les Mureaux, en la primera etapa, detrás de Kooij y Mads Pedersen (Lidl-Trek), y confirmó su buen estado de forma con esta prestigiosa victoria.

El ganador de la Milán-Turín 2023 – que, además de abrir sus libros en las pruebas WorldTour, también da a su equipo un debut absoluto en este primer éxito en este nivel superior de competición -, se impuso al neozelandés Laurence Pithie (Groupama-FDJ ) y a su compatriota Groenewegen.

Por su parte, Laurence Pithie recupera, gracias a las bonificaciones, el maillot amarillo como líder de la clasificación general, en detrimento de Olav Kooij, que sólo ocupó el puesto 17. Es la primera vez desde 2018 con Arnaud Démare, que un corredor del Groupama-FDJ –e incluso de un equipo francés– viste el maillot amarillo en la París-Niza. Pithie aventaja a Mads Pedersen (Lidl-Trek), sólo octavo este lunes, y a Olav Kooij, todos clasificados en el mismo segundo puesto.

Créditos de imagen: Paris-Nice Twitter – https://twitter.com/ParisNice/status/1764700492280533450/photo/1

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