Por La nueva Orbea Rise 2025 es mucho más de lo que su apariencia nos dice: en un primer vistazo, llama la atención el refuerzo ‘a lo Rallon’ que se ha incorporado en el cuadro. El resto, parece una ‘fotocopia’ del anterior modelo. Pero, como se suele decir, las apariencias engañan…
Aunque en el artículo que también hemos publicado donde, aprovechando toda la información técnica que los chicos de Orbea nos han facilitado en el ‘Press Kit’, detallamos a fondo esta nueva criatura de la firma de Mallabia, de manera breve diremos que la nueva Orbea Rise es ‘mucha’ más bicicleta de lo que era. No queremos decir con ello que la anterior no fuera una bicicleta en su máxima expresión: simplemente, los esfuerzos realizados por la marca (y en los que nos han insistido mucho) en dotar a la nueva Rise de más rigidez se notan….
Ya sabemos que, en un artículo, esa sensación es difícil de transmitir y, todo hay que decirlo, en la breve toma de contacto que hemos tenido con ella tampoco hemos podido probar a fondo lo que entendemos que nos ofrece de diferenciador esta eBike ‘light’, pero aún así notamos que esta nueva Rise 2025 se siente mucho más bici, tiene un aplomo mayor que la anterior, posee sensaciones al nivel de la todopoderosa Wild, pisa de maravilla y no se descompone al pedalear fuerte sobre ella.
Ahora bien, hay que decir que la nueva Rise se ofrece en dos versiones (al estilo de la Occam ‘pulmonar’): una denominada SL (Super Light), de enfoque ‘trail’ en el que se prima la efectividad, la velocidad y el pedaleo. Posee suspensiones que se van a los 140 mm en ambos ejes y una geometría que, siendo bastante ‘lanzada’, se contiene un poco (aunque mantiene ‘cotas’ del cuadro al nivel de la anterior Rise).
Por otro lado existe otra versión, la LT (Long Travel) con un enfoque más ‘endurero’ gracias a unos recorridos de suspensión ampliados (160 mm delante y 150 detrás) y a una geometría más lanzada y configurable, gracias a un nuevo sistema de ajuste que nos ha cautivado y que luego pasaremos a detallar…
Y nosotros hemos podido subirnos a una Rise LT M-Team que, debido a su orientación más ‘descender’ que la de la Rise SL, posiblemente aportará una sensación mayor de estabilidad y contundencia en sus ‘maneras’… esperamos poder probar la SL y contrastar.
La geometría del nuevo cuadro LT decíamos que es configurable, algo común hoy en día. Aunque, el sistema para ajustarlo, sí que es muy novedoso….tanto que está patentado por Orbea. Y es que uno de los problemas de los habituales ‘flip-chip’ para ser manipulados en marcha es la complejidad: casi nadie va a estar constantemente cambiando la configuración de su bicicleta en medio de las rutas.
Orbea ha creado el ‘Attitude Adjust’, un sistema que modifica la geometría, operación que se hace ¡en menos de un minuto! (¡¡¡comprobado!!!). Una pequeña llave allen escondida en el eje de la rueda trasera nos permite girar un tornillo en la bieleta del amortiguador …¡et voilá!. Modificaciones de 0.5º en la dirección y en el tubo del sillín, 5 mm en el reach, 2 mm en los ejes…
Cambiando configuración en el Attitude Adjust, ese ‘tornillito’ que ves en la bieleta negra del amortiguador
La Orbea Rise 2025 trae otra novedad que, sin miedo a equivocarnos, estamos convencidos de que será algo que la competencia más pronto que tarde va a imitar: hablamos del nuevo motor Shimano EP8 RS Gen 2. Su concepción ‘light’ más o menos se mantiene pero ahora viene con un nuevo modo de aporte de potencia que llega hasta los 85 Nm de torque, el RS+.
Por resumir el nuevo motor, digamos que es una prolongación del anterior: podemos tener el característico funcionamiento’light’ del RS conocido, con tres posiciones de aporte de potencia preestablecidas, llegando, en esta ocasión hasta un máximo de 54 Nm de torque. Pero luego podemos disponer del modo RS+ que sube hasta los 85 Nm. Aunque se sigue asociando el aporte de potencia en función de la cadencia de pedalada del ciclista, Orbea comenta al respecto que el nuevo motor ofrece un 15% más de potencia entregada en cadencias bajas, algo que ayuda en tramos de subida muy técnicos.
Las posibilidades de personalización de la unidad motriz son infinitas (App E-Tube de Shimano), pudiendo insertar hasta 14 perfiles diferentes…¡casi nada!!. En marcha, como imaginarás, se notan las diferencias, en especial en el modo RS+, lógicamente. La entrega es contundente, pero gradual, sin brusquedades. Se nota mucha fuerza y es de agradecer en subidas de mucha pendiente, en especial si llevamos muchos kilómetros encima y las piernas están cansadas.
Más potencia significa más consumo y, para ello, la capacidad de la batería ha aumentado, aunque no el peso. La anterior de 360 Wh deja paso a una nueva de 410 Wh (1,96 kg) igual de compacta (las nuevas celdas 21.700 ‘obran el milagro’) y la opcional de 540 Wh ahora se sustituye por una de 630 Wh (2,88 kg). Se sigue ofreciendo un Range Extender, aunque ha disminuido un poco su capacidad: ahora ofrece 210 Wh (1,04 kg).
En definitiva, la Orbea Rise 2025 va a marcar un antes y un después en el ciclismo de bicicletas eléctricas. Dos versiones en cuanto a enfoques de utilización y, sobre todo, un motor con dos caras distintas convierten a la nueva Rise en la bicicleta más versátil de la actualidad. Esta pequeña toma de contacto nos ha servido para corroborar ciertos aspectos diferenciadores, pero esperamos no tardar en realizar una extensa prueba donde exprimir a fondo las virtudes de la nueva creación de Mallabia. ¡Lanzamos la petición a Orbea…!
Modelo probado: Orbea Rise LT M-Team (10.999 €)
Más info en: Orbea
Crédito de las fotos: José Escotto
