Por Richard Gasperotti es embajador de la marca alicantina de bicicletas. Y no se le ha ocurrido otra cosa que subirse el Volcán Etna y… bajarlo, claro.. Dicen desde Mondraker que no hay porqué tener motivos para todo lo que se hace en esta vida. “Simplemente si puedes hacer algo, lo haces y punto. Como subirte a un volcán y bajarlo con una Superfoxy”…
Y a esta ocurrencia de Richard Gasperotti (y a su equipo), le cayeron una lluvia de preguntas de personas incrédulas con la idea…“¿Por qué subir a un volcán activo de más de 3.000 metros de altura? ¿Por qué subirlo con una bici a la espalda? ¿Por qué arriesgarse en un descenso incierto hasta la base?” era lo más comentado.
La respuesta del italiano fue contundente…“Porque podemos, y si podemos, lo hacemos. Así de sencillo”. Evidentemente, Richard era consciente de que esta hazaña podría causar perplejidad…“La
gente en el pueblo nos preguntaba que por qué íbamos a subir hasta el volcán con una bici”….
Que si era peligroso, que si íbamos a tardar 24 horas… El tema es que decidimos hacerlo para responder a todos los que preguntaban porqué. Llegar hasta arriba del cráter y verlo con nuestros propios ojos, era como estar en otro planeta… Era casi imposible creerse lo que veían nuestros ojos”.
El hecho de ascender un Volcán tiene la parte ‘mística’ de hacerlo en un entorno, digamos que peligroso. Pero el simple hecho de subir desde los 1.800m de altitud que hay en Piano Provenzana, hasta los 3.303m, para alcanzar la cima del mítico volcán Etna (que está activo), ya es una proeza en sí…. “Si con este video, conseguimos que tan solo una persona se levante del
sofá, nos confirmará que lo que hacemos tiene sentido…”, comentaba Richard orgulloso.
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