Por Florian Sénéchal se quejó de problemas con las bicicletas que utilizó en la París-Roubaix… ¡y fueron cuatro! – lo que habría perjudicado su actuación en la clásica. “Fue bastante mala”, afirma el francés del Arkéa-B&B Hotels, especialista en carreras de pavé.
El equipo no pudo mantener los buenos resultados obtenidos en el Tour de Flandes, donde Luca Mozzato logró el primer podio del equipo francés en un monumento.
En esta 121ª edición del Inferno do Norte, Florian Sénéchal, todavía en fase de recuperación tras romperse la clavícula en Omloop Het Nieuwsblad, el 24 de febrero, se vio afectado por fallos mecánicos. “Los problemas empezaron muy temprano, alrededor de los 150 km. Algo no estaba bien en la bicicleta, la horquilla o la potencia temblaban, parecía que se iba a romper. Había ruidos de carbón…”, dijo el corredor.
“Tuve miedo y me detuve para cambiar de bicicleta”, continúa Florian Sénéchal. “De todos modos, no podía ir más rápido. No podía apoyarme en el manillar. Sentí dolor en la clavícula”.
Pero fue solo el comienzo de los problemas para el piloto que finalizó sexto en la edición de 2019. “Tuve que cambiar de bici cuatro veces. En Carrefour de l’Arbre, el manillar de mi segunda bicicleta se soltó. Creo que tenemos un problema técnico con nuestra bici [N.de R.: de la marca Bianchi] y tendremos que investigarlo. Es molesto tener siempre problemas. No me caí… Las piernas estaban ahí, la condición física estaba ahí, no tengo nada que demostrar. Tengo que ser paciente. No quería rendirme”, concluyó Sénéchal, 65º, a 9,45 minutos del ganador Mathieu van der Poel.
Créditos de la imagen: Arkea B&B Hotels Twitter – https://twitter.com/arkeabbhotels/status/1776897630687089137/photo/1
