Tadej Pogacar falló el ataque ganador en Milán-Sanremo por segundo año consecutivo. Y con una estrategia similar: ataque a Poggio. Pero al igual que en 2022, este sábado nuevamente no fue suficiente para ganar la Clásica.

El esloveno del UAE Team Emirates hizo lo que pudo, ¡y eso fue mucho! Incluso tuvo unos metros de ventaja tras la aceleración que siguió al magnífico trabajo de su compañero Tim Wellens, pero no pudo resistir el contraataque de Mathieu van der Poel, ni tampoco sus adversarios directos, Wout van Aert y Filippo Ganna… Y el holandés ya no fue alcanzado hasta la línea de meta en Via Roma.

Además de la victoria que se le escapó, Pogacar también perdió el podio, batido en el sprint por Ganna y Van Aert. Cuarto puesto, uno por encima de lo que ganó en 2022 (5º). Al final, el sabor es poco a poco… ¡para los que solo entran para ganar!

“No me arrepiento”, dijo Tadej Pogacar. “Tenía un objetivo: atacar después de que Tim Wellens acelerara. Desafortunadamente, no era lo suficientemente fuerte como para aislarme. Los cuatro nos quedamos, y luego Van der Poel atacó. Disparó a la cima cuando ya me había puesto en rojo por mi aceleración temprana”, reconoció el ganador de dos monumentos: Lieja-Bastoña-Lieja y Lombardía (dos veces).

Y a pesar de la derrota, el esloveno no renuncia a ganar el Clásico de Primavera. “Crucé la línea de meta exhausto. Sin embargo, tengo muchas esperanzas puestas en las próximas ediciones de Milán-San Remo. ¿Vencer a Van der Poel en el Tour de Flandes? Los mejores ganaron la Milán-Sanremo, y también la Vuelta a Flandes”, concluye.

Fotografia: UAE Team Emirates

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