Por Según la firma norteamericana, la nueva Émonda ALR “es la bicicleta de carretera con la mejor relación calidad-precio de su gama”. Ya es la tercera generación de esta bicicleta con cuadro de aluminio, en este caso el exclusivo Alpha Serie 300 de Trek que imprime a la Émonda ALR de una gran ligereza y rigidez.
Y es que, de esta forma, un usuario con un presupuesto ajustado podrá hacerse con un bicicleta que ofrece una geometría totalmente rabiosa heredada de las máquinas que utiliza el mismísimo Trek-Segafredo.
A esa geometría se suma, además, el hecho de que la estética que han conseguido en el nuevo cuadro (de soldaduras totalmente pulidas gracias a la tecnología “Invisible Weld”) hace difícil ser diferenciado del cuadro facturado en fibra de carbono…
Otros detalles que la acercan a los modelos más exclusivos de la gama Émonda son el diseño aerodinámico Kammtail de los tubos del cuadro y la integración absoluta de los cables (desde la propia dirección), algo que redunda en un beneficio aerodinámico (y en una estética soberbia).
Por otro lado, la propia Trek destaca el hecho de haber desechado el pedalier del tipo Pressfit por uno roscado T47: es curioso, pero se está volviendo a este sistema tras unos años en los que se nos vendían los Pressfit como lo mejor de lo mejor… Bienvenido el roscado que facilita a los usuarios las labores de mantenimiento.
Trek Émonda ALR 5
La gama Émonda ALR se compone, por el momento, de dos acabados: el ALR 5 (2.499 €) con una transmisión y frenos de la serie 105 de Shimano, y el ALR 6 (3.399 €) que se decanta por la versión electrónica del 105 (la Di2).
Trek Émonda ALR 6
Shimano 105 Di2 de la ALR 6
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