Todos soñamos con hacernos con una bicicleta completamente nueva y, al ser posible, que responda a nuestros gustos y ya, como colofón, que además se adapte a nuestros bolsillos… tú, como nosotros, sabes que eso no siempre es posible, por lo que recurrir al mercado de segunda mano se presenta como una buena opción si no eres de los que desean tener siempre el ‘último grito’ en bicicletas.

Con este informe pretendemos que la acción de comprar una bicicleta de segunda mano sea un éxito y no se convierta en un suplicio: todos estamos acostumbrados a fijarnos en una serie de aspectos que quizás no sean los más definitivos a la hora de hacerse con una buena compra… vamos a intentar darte una serie de recomendaciones que te orienten de la mejor manera a fijarte en ciertos aspectos que sean fundamentales para hacerte con la bicicleta de tus sueños (o casi…).

La evolución de una montura nueva con respecto a una antigua es grande…pero el precio de adquisición también ha ‘evolucionado’ mucho…

Nos hemos fijado en las Mtb porque quizás, por el hecho de que su utilización sea algo más ‘cañera’, su estado suele ser algo más delicado…además, poseen elementos como la suspensión que las de ruta adolecen, por lo que su elección será algo más delicada.

1.Horquilla de suspensión

Una buena horquilla es fundamental. Además, el mantenimiento no es precisamente económico y su reparación, menos aún. Fíjate en las posibles holguras de las barras con respecto a las botellas: pide ayuda a un amig@, que te permita corroborar su estado, tirando cada uno de ambos elementos para detectar esas holguras que determinarán un mal estado de los casquillos. Si además las barras están dañadas (fíjate en posibles marcas de desgaste, como líneas a lo largo de ellas…), su reparación será muy poco accesible…

Otro aspecto a corroborar son las posibles pérdidas de presión (en caso de ser una horquilla de aire), algo fácil de detectar: lleva contigo una bomba de aire de suspensiones, comprueba la presión existente y comprime la horquilla en varias ocasiones (sin quitar la bomba de la boquilla de inflado). Tras ello, verifica nuevamente la presión que no haya variado. Comprueba el bloqueo o los modos de funcionamiento que incorpore.

2.Amortiguador de suspensión trasero

Comprueba sus modos de funcionamiento: ya sabes, si existe la posibilidad de ser bloqueado, si tiene otros modos como la plataforma de pedaleo… verifica que el dial de rebote actúa y, con el tema de las pérdidas de presión, la manera de comprobarlo es la misma que la te hemos explicado para la horquilla.

3.Rodamientos

Es verdad que los rodamientos no son un componente excesivamente caro (bueno, hay de todo…), pero no está de más verificarlos porque algunos, como los del sistema de suspensión, tienen una sustitución algo más engorrosa: chequea las posibles holguras de la dirección (pueden ser producto de una dirección mal ajustada), los del eje del pedalier (forzando un poco las bielas de forma perpendicular al giro) y los mencionados de la suspensión (fuerza todo lo posible el sistema para verificarlo).

Con los rodamientos de las ruedas pasa parecido: en caso de ser mediante conos, es posible que las holguras provengan de un mal ajuste pero si son rodamientos sellados, la holgura se deberá a que estén en las últimas… y ya sabes, cuanto más ‘elitistas’ sean las ruedas, más caros serán sus rodamientos.

4.Transmisión y sistema de frenada

Los componentes de la transmisión, al ser de desgaste (ya sabes, cadena, cassette, platos…) su reparación/sustitución será más sencilla. Pero ojo, transmisiones muy exclusivas llevan componentes igual de exclusivos y, en caso de tener que sustituir algunos de ellos, tendrás que sumar una buena cantidad a la que te pidan por la bicicleta. Valora la posibilidad de optar por componentes de terceras marcas que puedan ser más asequibles, aunque perderás parte del ‘caché’ de la transmisión en cuestión…

En cuanto a los frenos, los problemas suelen ser bastante asumibles: aire en el sistema o pastillas casi al límite suele ser habitual en bicicletas de muchos kilómetros. Pero, aún así, no está de más que verifiques su funcionamiento por si detectas algo raro…

5.Estado del cuadro

Sobra decir que es fundamental que chequees posibles golpes en el cuadro, sobre todo si es de fibra de carbono: una reparación en él puede salirte más caro casi que una bicicleta nueva…

Una visual rápida debería ser suficiente, y no tengas reparo en preguntar al vendedor…y, ante la duda, descarta la operación. Si te das una vuelta, observa posibles crujidos o sonidos raros…

6.Componentes ‘varios’

A lo habitual de ‘toda la vida’ se suman componentes que ahora se han hecho imprescindibles: comprueba el funcionamiento de la tija telescópica, que suba y baje bien. Las holguras en este tipo de ‘gadgets’ suele ser habitual, aunque tampoco demasiada…ojo no te metan algo en mal estado.

Los neumáticos no son definitorios ya que son de fácil sustitución. Ahora bien, si el sistema es tubeless ya sabrás que baratos no son, así que tenlo en cuenta. Intenta sonsacar cuándo fue la última vez que cambiaron el líquido antipinchazos, por saber si tienes que reponerlo.

Fotos: Archivo GoRide

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José Escotto
¡El responsable de GoRide España! No falta experiencia en el área de la bicicleta (y el deporte en general) y mucho menos entusiasmo a la hora de difundir las últimas novedades sobre ciclismo y BTT.

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