Por El caso Stratus es todo un clásico en el catálogo de Bell, quizás por ser uno de los más equilibrados que tiene en la gama de modelos de carretera. Y es que posee gran parte de las características de los cascos más exclusivos, como el diseño externo de la carcasa del Z20, pero manteniendo un coste de adquisición que, sin ser barato, se mantiene dentro de un orden (149,95 €).
Su principal característica es el sistema MIPS que incorpora para dotar de mayor seguridad a este elemento tan esencial. De este sistema ya hemos hablado largo y tendido en uno de nuestros especiales, el cual te adjuntamos al final por si quieres darle un repaso.
El sistema constructivo de la carcasa se realiza mediante la tecnología In-Mold, como es habitual, utilizando el policarbonato como material. El peso final es bastante comedido (271 g en talla M), solamente un gramo más que el exclusivo Z20. Por cierto, se ofrece en tres tallas (gran parte de los cascos del mercado se ofertan solamente en dos tallas…).
Internamente, además de el entramado del MIPS, se inserta EPS expandido para absorber los impactos. La cabeza contactará directamente sobre unas líneas de Foam que otorgan un perfecto ajuste y comodidad de utilización.
A nivel ajuste, el Stratus posee el Float Fit System que es un sistema que, mediante un pequeño dial trasero de goma puedes ajustar la estructura interna a tu medida. No es una novedad en el mercado pero el nivel de terminación es alto.
Un detalle muy curioso que Bell comenta en las caracteríticas de este modelo es lo que ellos han denominado “Sweat Guide” y es un diseño interno exclusivo que hace que se guíe el sudor hacia la parte delantera del casco y que este no pueda caer sobre las gafas….ingenioso.
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