Julian Alaphilippe ha asumido el papel de gregario de lujo de Remco Evenepoel en la presente edición de la Vuelta a España. El francés del Quick-Step Alpha Vinyl, ante la falta de oportunidades -y de una condición física óptima- para aspirar a victorias de etapa, dice estar satisfecho con el trabajo realizado para su joven compañero de equipo, ayudándole a liderar apruebas.

“Estoy muy satisfecho. Tuvimos grandes días en las etapas selectivas. El objetivo era llevar bien a Remco hasta el comienzo de las últimas subidas. Tiene excelentes piernas desde el comienzo de La Vuelta y es muy positivo tener la ventaja ahora, al seguir esta larga contrarreloj”, explica de fondo el bicampeón del mundo.

“He estado haciendo todo lo posible para ayudarlo de la mejor manera, no solo para esta Vuelta, sino desde el comienzo de la temporada. Es genial poder competir para un líder como Evenepoel, que está compitiendo por la general de una Gran Vuelta”, reconoce el corredor de 30 años, oriundo de Saint-Amand-Montrond, quien, al ser instado por los periodistas sobre cuál es el mejor consejo que podría dar a Remco sobre cómo lidiar con la presión de la dirigencia , se negó a divulgarlo, con una broma. “Si tengo algún consejo para Evenepoel… ¡No lo diré aquí! [risas]”

En la ocasión, Alaphilippe también aprovechó para hacer balance de su estado de forma, a menos de un mes del Mundial. En dificultad en el inicio de la semana, sobre todo en la 4ª etapa, que por tener un perfil como el francés no pudo jugar su carta. Sin embargo, desde entonces Julian Alaphilippe parece estar encontrando las mejores sensaciones y el trabajo que viene desarrollando a favor de Evenepoel es un buen indicador. “Ha sido una semana muy difícil. No ha sido nada buena, sobre todo al principio, pero las cosas van mejorando”, concluye.

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