El mejor manillar deberá ser el que mejor se adapte a ti, sin tener en cuenta el uso teórico al que vaya destinado dicho manillar (ni, por supuesto, las modas…).

Pero, como todo en la vida, cada característica tiene su razón de ser, así que vamos a seguir unas pautas que nos guíen en nuestra elección por si tienes en mente cambiar tu viejo manillar.

Formas y cotas del manillar

Planos: Su enfoque es mayoritariamente para XC e incluso un Trail ‘ligero’. Se busca ligereza y una posición eminentemente al ataque. El que sean planos significa que no poseen la curvatura que hace que se eleven….pero ello no significa que sean totalmente paralelos al suelo, ya que aún siendo planos pueden poseer una cierta elevación de la puntas.

Elevados : En la búsqueda de un mayor dominio y control, los manillares se fueron elevando con respecto a la posición de la potencia. Existen dos medidas al respecto, la que nos indica (en milímetros) lo que se eleva en horizontal (elevación o ‘Bar Rise’) y la que viene dada por la angulación con respecto a la horizontalidad, que van ‘tornando’ las punteras hacia arriba (en grados): a esta cota también se la conoce como inclinación vertical (algunos fabricantes también hablan de curvatura vertical o, en inglés, ‘Upsweep’). Esta forma del manillar también permite ganar rigidez.

Punteras: Dependiendo de nuestras preferencias, las puntas del manillar pueden ir más abiertas (alineadas con el resto del manillar) o más cerradas (cota indicada por la curvatura hacia atrás, retroceso o ‘Backsweep’, que viene dada en grados), e incluso algo más elevadas con respecto a la horizontalidad del manillar (inclinación vertical o ‘Upsweep’). Unas punteras más cerradas o elevadas harán más cómodo el agarre, ganando sensación de control, a costa de perder una posición más al ataque que facilite el pedaleo, por ejemplo, de pie.

Longitud: Las mayores longitudes otorgan mayor control sobre la bicicleta (una palanca mayor). Se pierde rapidez en las reacciones, pero se gana en estabilidad y manejabilidad. Hace unas temporadas los manillares más largos respondían a categorías como el Enduro o el DH, aunque hoy en día ya no son exclusivos de estas…

Diámetro: Suele tomarse en el lugar donde se ancla a la potencia, ya que el diámetro en un manillar suele ser variable. Podemos diferenciar tres posibilidades: la medida estándar (ya en desuso en gamas medias-altas) de 25.4 mm, la oversize (que ya casi es la estándar) de 31.8 mm. y un nuevo diámetro, que comercializan pocas marcas de momento, que se va hasta los 35 mm., dotando de gran rigidez en los modelos con una orientación más ‘’descender’’.

Materiales

Aluminio: Se fabrican en mayor número de aleaciones que los cuadros, ya que las exigencias son distintas, pudiendo encontrar, además de las conocidas series 6000 y 7000, en la serie 2000. El conificado también está presente (doble y triple), logrando pesos bajos con una gran rigidez.

Fibra de carbono: Generalmente estos componentes has sido realizados en fibra trenzada, con una gran rigidez. Pero en la continuada búsqueda del aligeramiento, la unidireccional ya ha entrado también en escena, siendo la más deseada (mejor relación entre rigidez y ligereza que la trenzada)

4 claves para elegir un manillar

Con la cantidad de opciones existentes, la elección del manillar que mejor se nos adapte no es tarea fácil. Dependerá, además del tipo de mtb que realicemos, de nuestras preferencias. A continuación te damos unas claves que te puedan ayudar en la difícil elección:

1. Comodidad: Si buscas comodidad ante todo, una posición dominante y no eres de los que te pones con frecuencia de pie para pedalear fuerte, un manillar de doble altura puede ser un buen complemento, ya que te hará ir más erguido. En el caso de querer optar por un manillar plano, los que poseen cierta inclinación vertical palían de esta manera la falta de la ‘doble altura’. Ojo con los manillares extra-anchos si lo que buscas es comodidad por encima de otros aspectos, ya que una excesiva anchura hará que tu cuerpo tenga que adelantarse más de lo deseado para poder agarrarlo con seguridad e irás con los brazos excesivamente abiertos, sobre todo si no eres muy anch@ de hombros.

2. Efectividad ante el crono: Aquí entran en juego los manillares más enfocados al XC, planos y relativamente estrechos: permiten una postura más aerodinámica y una reactividad en el manejo alta. Si además tu montura tiene arandelas bajo la potencia que la eleven, puedes ir quitando una a una para bajar algo más el manillar. O si tu potencia puedes invertirla, ganarás unos centímetros de más. Pero tienes que tener en cuenta que, cuanto más bajes el manillar, más manejabilidad perderás y más nerviosismo ganarás. Dentro de esta categoría podemos encontrar manillares con la potencia integrada, ideales para arañar gramos a la báscula, pero con el inconveniente de que un cambio en la potencia supone el cambio de todo el conjunto.

3. Todo en uno: Si tu hábitat está en los descensos pero sin perder capacidades de ascenso, un manillar con una anchura considerable, pero sin pasarse (sobre los 740 mm es una perfecta medida) puede ser un gran aliado. Te brindará un gran compromiso entre manejabilidad y estabilidad. Puedes encontrar manillares planos o de doble altura, dependerá si queremos un poco más de comodidad o efectividad. Una buena opción, cuando son muy anchos, es que sean algo cerrados de puntas, para no perder sensibilidad.

4. Descensos: Si quieres exprimir todas tus posibilidades en este entorno, sin tener en cuenta otros, los manillares muy anchos son los ideales. Te dan una gran palanca y sensación de control; podrás dominar cualquier movimiento brusco de la dirección ante un imprevisto con total seguridad. Un manillar de 760 mm. ya empieza a tener buenas propiedades, llegando a los 780 mm si las bajadas son prioridad. Los de 800 mm están dejándose ver en eBikes, donde las inercias generadas por el peso también entran a formar parte de las circunstancias que has de tener en cuenta. En estos casos, cuanto mayor sea la elevación y/o inclinación vertical más sensación de dominio, más control y más estabilidad conseguirás

Conclusiones GoRide

Sobre todo, y lo más importante, es estar cómodo y no dejarse llevar por las modas. Y también hay que tener en cuenta que la comodidad o efectividad a los mandos de una bicicleta no viene únicamente por el manillar que tengamos. La potencia influye en gran medida, ya que una excesivamente larga o corta, o con una angulación positiva o negativa excesiva hará que, por mucho que modifiquemos nuestro manillar, no te permita encontrar la postura ideal.

También la longitud a la que esté cortado el tubo de dirección, ya que muchas veces nos afanamos en modificar el manillar y con unas arandelas más o menos en la dirección conseguiríamos el efecto buscado. Como siempre, lo más recomendable es acudir a un centro especializado donde puedas probar diversas opciones y elegir la que más se ajuste a tus necesidades.

Fotos: Archivo GoRide

José Escotto
¡El responsable de GoRide España! No falta experiencia en el área de la bicicleta (y el deporte en general) y mucho menos entusiasmo a la hora de difundir las últimas novedades sobre ciclismo y BTT.

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